29 de julio de 2014

6 formas de mejorar tu conversaciones


1. Muestra un interés real. 

Cuando hables con alguien, especialmente en un ambiente ruidoso y ocupado, dale a él o ella toda tu atención. Si te encuentras distraído o no los puedes escuchar bien, pídeles que se muevan a una zona más tranquila. Ponte en el lugar del otro y trata de ver la situación a través de sus ojos. Haz preguntas y motívalos a que elaboren. Aunque no hayas experimentado la misma situación, trata de compartir una historia personal sobre un tiempo en el que te sentiste casi igual.

2. Usa las palabras mágicas: “Cuéntame”. 

Mucha gente valorará la oportunidad de compartir sus historias y experiencias. Los conversadores exitosos evitan las preguntas que pueden ser respondidas con un simple sí o no. Haz preguntas abiertas y escucha. Por ejemplo, podrías decir: “Cuéntame Paco, ¿qué te motivó a iniciar tu negocio?”, o pregunta su opinión “Me gustaría llevar a mi familia de vacaciones. Cuéntame ¿tienes algún lugar favorito para salir de vacaciones?” Cuando eliges un tema de conversación, eso demuestra interés en la otra persona, la discusión fluirá más.  

3. Di el nombre de la persona. 

Dale Carnegie dijo una vez “El nombre de una persona es para ese individuo el sonido más importante en cualquier lenguaje”. Cualquier conocido se sentirá halagado e impresionado si recuerdas cómo se llama. Si se te dificulta recordar nombres, practica lo más que puedas. Cuando conozcas a alguien por primera vez, di el nombre de la persona inmediatamente. Responde algo como “Me da mucho gusto conocerte, Fernando.” Luego usa su nombre un par de veces en la conversación. Cuando la plática termine repite su nombre una última vez.

4. Es válido concordar con esa persona, pero también expresa tranquilamente tu desacuerdo.

Cuando alguien está de acuerdo contigo, se crea un lazo instantáneo. De repente ambos tienen algo en común. De cualquier manera, las relaciones profesionales más fuertes exigen respeto mutuo y admiración, hasta en los desacuerdos. La tolerancia y el respeto son vitales para un networking exitoso. Si realmente no estás de acuerdo con la opinión de alguien, dile educadamente que tú no lo ves así. Haz preguntas y permite que la persona te exprese su razonamiento.

5. Habla menos, escucha más.

Cuando alguien te hable, escucha con cada parte de tu cuerpo. Asiente, haz contacto visual e involúcrate en todo lo que tenga que decir. Escuchar atentamente construiráconfianza y te ayudará a establecer una relación profesional. Cuando se te dé la oportunidad, haz preguntas pertinentes. Eso te ayudará a demostrar tu interés. Si no entiendes, haz preguntas más específicas. Es mejor confirmar suposiciones en lugar de arriesgarse a una falta de comunicación.

6. No interrumpas o cambies de tema. 

Muchos profesionales terminan las oraciones de los otros sin darse cuenta. Si haces esto e interrumpes la oración de la otra persona, puedes prevenir que él o ella exprese de verdad sus pensamientos. Aunque tus intenciones sean buenas, el otro individuo puede percibir que te sientes como un sabelotodo o que tienes prisa. O peor aún, puede pensar que estás poniendo palabras en su boca. Deja que la gente tenga tiempo para expresarse antes de que respondas. Tu paciencia y consideración serán apreciadas.  

FUENTE: www.soyentrepreneur.com 

3 tips para tener una marca exitosa


1. Construye la personalidad de la marca y vive conforme a ella en todos lados. 

La personalidad de la marca y la forma en la que ésta te hace sentir es su esencia. Consiste de varios elementos, incluyendo el logo, los colores, frases, mascotas de las marcas, una mirada y sensación distinta del producto, sitio web, diseño de la tienda, diseño del producto, servicio de entrega etc.

Cuando cada uno de estos elementos está en perfecta sincronía, obtienes una personalidad distintiva que hace que la marca sea reconocible a través de los años. Un ejemplo es la marca Virgin. Su personalidad es juguetona, divertida, joven y brillante. Todo sobre la marca, desde su publicidad hasta el sitio web, sus empleados y tiendas tienen el ADN de Virgin.

2. La buena calidad es cosa del pasado. 

La experiencia del cliente es lo que hace grande a la marca. Las buenas marcas ofrecen calidad, eso es un hecho. Lo que la engrandece es cuando van un paso adelante y sorprenden a los clientes con cosas que nunca esperaron. No es sobre prevenir sus quejas, es sobre crear grandes experiencias que hacen que el cliente regrese por más.

3. Conoce el pulso de tu consumidor.

Una gran marca sabe lo que pasa en la mente del consumidor. La percepción de los clientes es lo que de verdad ayuda a la marca a crear productos y servicios que satisfagan sus necesidades sin que ellos lo pidan. Reúnen datos de los mismos en tiempo real y lo juntan con el aprendizaje que tienen en los mercados que operan y voilá los dos juntos crean el marketing mágico.

La grandeza verdadera no viene de una plantilla de fórmulas, viene de una fundación sólida de valores sobre los que la marca está construida, valores que forman una conexión real con tus clientes y hacen que la marca se quede plasmada en sus mentes durante varias generaciones.


FUENTE : www.soyentrepreneur.com 

15 de julio de 2014

5 cosas que no debes decirles a tus clientes


El mundo empresarial puede ser muy difícil de navegar. Aunque tengas un gran producto, debes procurar y retener a tus clientes. Cada consumidor tiene una personalidad diferente y expectativas para la gestión.

Muchas empresas están compitiendo para negociar y un paso en falso puede hundir la empresa. Aquí hay algunas cosas básicas que debes tener en mente, incluyendo lo que no debes decir a los clientes sin importar qué tan bien piensas que los conoces.

1. ¿Puedo llevarte en mi nuevo Bentley? 

Lo que debes hacer es que tus clientes piensen que eres el mejor en lo que haces y el más exitoso. No quieres que piensen que te pagan en exceso para aguantar tus extravagancias.

Algunas de éstas incluyen los celos. Si el cliente no conduce un auto lujoso, él o ella no quiere saber si tú lo haces. El cliente tal vez imagine que la razón por la que tienes un carro así quiere decir que cobras en exceso por los servicios.

2. Tu actual proveedor o vendedor es terrible. 

Nunca hables mal de competencia sin importar lo que sabes o pienses de ellos porque no saldrás bien parado.

3. No quieres eso. Quieres esto mejor. 

Siempre dales a tus clientes lo que desean. Sin importar lo que digan, la gente generalmente piensa que lo que quiere está bien.

Decir que están equivocados los puede ofender y hacer que quieran ir con la competencia. Siempre puedes proponer una opción adicional para considerar, pero hazlo con sutileza. Al final es la elección del cliente y podrás vivir con las consecuencias si ellos pueden.

4. ¿Alguna vez te conté sobre mi loco fin de semana en Las Vegas? 

Hay una diferencia entre socializar y compartir demasiada información. A tu cliente seguramente le dará risa tu historia, pero también cuestionará tu discreción y profesionalismo. Aunque tengas una relación de amistad con el consumidor, no hagas que la conversación se vuelva tan personal tan pronto. Está bien preguntarle sobre su familia o sus vacaciones, pero no te involucres tanto.

5. Escuché que tu compañero de trabajo se está divorciando. 

No chismees. Esto muestra una falta de discreción y si hablas así frente a otra persona, un cliente puede asumir que también hablas así de él o ella. Si quieres discutir de gente que ambos conocen, encuentra algo positivo que decir. Te encontrarás con un consumidor alegre, amigable y profesional que quiere estar cerca.


FUENTE: www.soyentrepreneur.com

15 cosas que un emprendedor hace diario


Los emprendedores más efectivos se ven a sí mismos como un activo. Continuamente invierten en ellos y en su futuro con educación continua y auto mejoramiento.

Si quieres ser un mejor emprendedor y hacer crecer tu negocio, dedícale tiempo y energía a mejorar tus hábitos diarios.

Aquí hay 15 cosas que un empresario exitoso hace en su ocupado día laboral:

1. Desayuna. 

Para alcanzar tu máximo rendimiento, tu cuerpo necesita combustible. En lugar de sólo beber una taza de café de camino a tu oficina, tómate unos cuantos minutos para comer algo o tomar un smoothie de proteínas.

2. Planea su día. 

La primera cosa por la mañana es ver tu calendario y priorizar tus actividades. Si trabajas mejor en cierto momento del día,bloquea esas horas para trabajar en silencio. Yo trabajo mejor por las mañanas, así que trato de apartar al menos 90 minutos para hacer mis cosas antes de que las distracciones comiencen.

Mientras estás en eso, programa pequeños descansos a lo largo del día para comer algo saludable y tener energía.

3. No revisa su email de inmediato.

Es difícil no revisar tu smartphone al despertar y ver quién te ha intentado contactar. Checar frecuentemente tu correo es una distracción de lo que deberías estar haciendo por las mañanas. Trata de esperar hasta las 9 ó 10 a.m. para hacerlo, al menos hasta que hayas completado una de las cosas urgentes. Si trabajas en un proyecto importante, trata de no revisar tu email más de tres veces al día.

4. Recuerda su propósito. 

Tómate algunos momentos antes de iniciar tu día laboral para recordar las metas de la empresa. Piensa en tu cliente y en qué áreas de tu negocio hay mayor rentabilidad. A veces nos enfocamos en otras cosas y se nos olvida lo que nos trae la felicidad y ganancias.

5. Hace una cosa a la vez. 

Vivimos en un mundo que alaba el multitasking. Desafortunadamente, cuando tienes demasiadas cosas que hacer, te puedes distraer con interrupciones y fallos sin importancia. Para ser productivo y efectivo, prioriza, delega cuando sea posible y enfócate.

6. Visualiza. 

Puedes sentirte algo tonto, pero cierra tus ojos e imagina el éxito. Piensa cómo te sentirás cuando alcances tus metas. La visualización es una herramienta poderosa y puede ayudarte a tener tus aspiraciones hasta adelante. También puede poner una imagen de lo que te gustaría lograr.

7. Dice “no”. 

Los emprendedores sienten una presión especial para aceptar cualquier oportunidad que venga hacia ellos. De cualquier manera, no toda oportunidad te beneficiará a ti o a tu negocio. El tiempo es la comodidad más valiosa. Sé selectivo respecto a lo que aceptes hacer.

8. Valora su tiempo. 

A diferencia del dinero, el tiempo es un recurso no renovable. Cuida tu tiempo y dedícalo a hacer cosas importantes para ti y tu empresa. Evita las distracciones cuando sea posible. Aunque facilites o atiendas a una junta online o en persona, aclara el tiempo de inicio o final. Cuando alguien pida una cita o una consulta contigo, trata de preguntar desde antes en qué puedes ayudarlos para que investigues.

9. Delega. 

En los primeros días de mi negocio, pensé que podía ahorrar dinero y hacer todo yo mismo. Luego me di cuenta de que las tareas pequeñas y mundanas me estaban alejando de cosas que ayudaban más a mi negocio. Cuando te satures de actividades o no puedas encontrar una solución, contrata a alguien para que te ayude.

10. Escucha. 

Cuando hables con un empleado o colega, ten en cuenta que toma tiempo entender lo que te están diciendo. Los líderes que saben escuchar efectivamente, evitan los malos entendidos y prácticamente no piden aclaraciones después.

11. Muestra gratitud. 

Hazlo un hábito diario sentarte y agradecer las oportunidades que te han dado y las cosas que has logrado hasta ahora. Recordar tus éxitos pasados te mantendrá enfocado, presente y productivo.

12. Se para y se mueve. 

¿Sabías que sentarse es la nueva manera de fumar? Esta rutina de estar en el coche y en el escritorio puede ser mala para tu salud. Los estudios muestran que esto aumenta los riesgos de diabetes, enfermedades del corazón y ciertos tipos de cáncer y obesidad. Sin importar cuándo, tómate unos minutos para levantarte y realizar alguna actividad cada hora. Es bueno para tu cuerpo y mente.

13. Respira profundamente. 

Mucha gente toma respiraciones cortas. Cada hora más o menos levántate de tu escritorio, estírate y respira profundamente 10 veces. Este corto descanso te llenará de oxígeno y te preparará para tu próxima tarea.

14. Toma un break para el lunch.

Ponte de pie y come en otro lugar. Si no puedes perder ni un segundo haz del lunch tu hora del networking. Organiza las juntas en la semana con clientes clave, socios o amigos.

15. Limpia su escritorio. 

Al final del día, limpia el desorden. Guarda tus plumas, papeles y otras cosas. Un escritorio limpio te dará borrón y cuenta nueva para el siguiente día y prevendrá que te sientas saturado del trabajo del día anterior.

FUENTE: www.soyentrepreneur.com